21 gramos... el peso del alma

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EL RESULTADO PROVIENE DE UN CURIOSO EXPERIMENTO DESARROLLADO EN 1907

 

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Dicen que todos perdemos 21 gramos en el momento exacto de nuestra muerte, y que eso es lo que pesaria nuestra alma. Quiza tu tambien hayas escuchado esta afirmacion pero... ¿cual es el origen de esa afirmacion, cuanto pesa el alma?

Pues para ello hay que remontarse a principios del siglo XX, en concreto a marzo del año 1907:

"En marzo de 1907, un doctor en medicina llamado Duncan MacDougall puso a 6 personas moribundas en diferentes balanzas que tenían una precisión de 3,2 gramos y 4 de esas personas experimentaron una pérdida de entre 10 y 40 gramos en los 15 minutos alrededor de su muerte."

Y sí, esa débil y vaga afirmación es lo que generó que tantos crean en que la continuidad de la personalidad a través del alma, luego de la muerte, es una realidad científica. Y la bola de nieve del mito urbano creció hasta llegar a nuestros dias e inspirar una taquillera pelicula de Hollywood incluso.


 

 

El Doctor en Medicina Duncan MacDougall, de Haverhill, Massachussets, publicó en marzo de 1907 una demostración científica de la existencia del alma. Partió de la idea de que si las funciones psíquicas continúan existiendo como una personalidad o individualidad separada después de la muerte del cuerpo y el cerebro, entonces tal individualidad sólo puede existir como un cuerpo ocupante de espacio.

Y como tal, debería tener una cierta masa, que al desprenderse del cuerpo, pueda notarse una diferencia de peso en el cuerpo. Utilizando a seis pacientes terminales de quienes no da detalles más que su sexo y que se encontraban agonizantes. Cuatro eran tuberculosos, uno tenía un coma diabético, y del sexto no da datos.

Los pacientes fueron colocados en camillas que estaban sobre balanzas de comparación, las que hay que poner lo que uno quiere pesar de un lado, y del otro "pesitas" que se sabe cuánto pesan. Durante el período de tiempo que pasó hasta la muerte de cada uno, el doctor fue ajustando la cantidad de "pesitas".

Hay que tener en cuenta que del cuerpo se evapora agua mediante la transpiración y la respiración, que los pacientes tal vez orinaron o defecaron, que bebieron o se alimentaron, y que hasta el más mínimo movimiento de los mismos modifica el equilibrio de la balanza.Los resultados fueron los siguientes traducido casi literalmente del original, (una onza son unos 28,35 gramos)

1. "De repente, y coincidiendo con el momento de la muerte, el peso disminuyó en 3 cuartos de onza (21,3 gramos)."

2. "El peso perdido resultó ser media onza, luego un rato mi colega determinó que el corazón se había detenido. Me fijé de nuevo y la pérdida era de una onza y media y 50 granos (45,8 gramos)"

3. "Mi tercer caso mostró una pérdida de media onza, coincidente con la muerte, y una pérdida de otra onza algunos minutos después (un total de 42,65 gramos)" (evidentemente este paciente tenía dos personalidades cuyas almas se fueron en momentos diferentes..)

4. "En el cuarto caso, desgraciadamente las escalas no fueron bien ajustadas, y hubo interferencia por parte de personas que se oponían a nuestro trabajo (!)... Lamento que esta prueba no haya dado resultados."

5. "En el quinto caso la aguja de la balanza se inclinó mostrando una pérdida de tres octavos de onza (10,6 gramos), pero luego volvió a su posición inicial, donde se mantuvo 15 minutos a pesar de quitar las pesitas (!?)" (en este caso, podemos apreciar que el alma se resistía a irse del tuberculoso cuerpo..)

6. "Mi sexto paciente murió justo cinco minutos después de colocarlo sobre la balanza, mientras estaba ajustando la aguja medidora, así que no sirve el dato."

MacDougall también realizó un experimento control, envenenado a 15 perros y pesándolos en el momento de su muerte, del cual obtuvo resultados negativos (los perros no tienen alma... cosa en la que yo no estoy de acuerdo, aveces esos animalitos demuestran tener una alma más grande que la de un humano).

Cuatro años después, en 1911, el New York Times sacó una nota de tapa explicando que el Doctor había demostrado científicamente la existencia del alma, y que tenía planes para hacer experimento sacando fotos y radiografías en el momento de la muerte, para poder obtener una imagen del alma yéndose del cuerpo. Si el éste experimento se realizó, no hay registros de él en internet por lo menos.