Avistado y grabado un pez serpiente de 17 metros

Si se quisiera extenderlo en toda su longitud, sería necesario subir hasta el sexto o séptimo piso de un edificio. Así de “alto” es el “pez serpiente”, grabado por las cámaras de un submarino no tripulado durante una investigación realizada por científicos de la Universidad Estatal de Louisiana en el Golfo de México, una de las zonas en el mundo más batidas para la exploración de petróleo.

El pez serpiente, cuyo nombre científico es Regalecus Glesne, se mostró a la cámara a unos 1.500 metros de profundidad y fue seguido por unos cinco minutos antes de que desapareciera de nuevo en el abismo. Sobre la base de las distintas grabaciones realizadas en diferentes lugares de su cuerpo se pudo establecer que su longitud alcanza los 17 metros. Hasta ahora se suponía que dicho pez pudiera alcanzar una longitud máxima de unos 10-11 metros, dado que los ejemplares pescados superan, sólo excepcionalmente, los 7-8 metros.

Por muchos es también denominado el rey de los arenques porque algunas veces se encuentra en las proximidades de los bancos de arenque. Tiene un cuerpo cintiforme y sin escamas. Se trata de una especie batipelágica que vive entre la superficie y los 3.000 metros de profundidad. Por sus características inicialmente fue considerado un animal legendario, pero luego fue capturado y los biólogos marinos y los científicos se han explicado muchos de los avistamientos, un poco por todo el mundo, de “monstruos marinos’.

La singularidad del hallazgo fue testimoniado por Mark Benfield, que teledirigía el submarino: “Al principio dimos poca importancia a lo que la cámara estaba grabando, ya que parecía estar ante uno de los muchos tubos que se utilizan para la perforación petrolífera, pero cuando enfocamos la cámara nos dimos cuenta de lo que estábamos observando.

El pez que estaba en el fondo se puso en movimiento y fue seguida de inmediato por la cámara. La grabación parece ser la primera de un espécimen vivo que nada a esa profundidad. El animal se mueve ondulando su columna vertebral, dándose a sí mismo el impulso necesario para alcanzar una velocidad considerable.

La búsqueda de ejemplares similares hace parte del proyecto Serpent del Centro Oceanográfico Nacional, de Southampton, en los Estados Unidos. “La investigación en estas aguas se subvenciona por quienes están haciendo perforaciones y exploraciones petroleras y el resultado es el mejor agradecimiento a los esfuerzos realizados”, dijo Benfield.

Pero el descubrimiento del excepcional pez serpiente no es el único. De hecho, durante las inmersiones del submarino, se han seguido peces de los que se conoce poco sobre su comportamiento en las profundidades, su hábitat principal.

La Policía interrumpe un funeral y se llevan al difunto

 

José Diego Agustín Castillo Milanés, de 70 años, era velado en una capilla católica de Nicoya, en el noroeste de Costa Rica, cuando llegaron agentes de la policía judicial a llevarse su cadáver, dijeron allegados al diario La Nación.

"Por razones aún desconocidas, personal médico entregó el cadáver del anciano a sus familiares cuando, según la ley, debía ser remitido a la Morgue Judicial" para practicársele la autopsia, agregó el periódico.

El hombre murió el miércoles, después de haber permanecido casi un mes en coma en un hospital tras ser atropellado el 9 de enero.

La policía irrumpió en la capilla el jueves al mediodía, cuando se oficiaba una misa y el cuerpo (...) estaba expuesto en el féretro en presencia de unos 30 familiares y amigos.

"Me dijeron que había un error, que no podíamos enterrarlo porque debía ser llevado a la Morgue Judicial", expresó la hermana del difunto, Nydia del Carmen Castillo. "Casi me caigo patas arriba de la impresión", dijo al rotativo. "Fue lo más horrible que le puede suceder a una persona. Esto no se lo deseo a nadie, me gustaría estar dormida y pensar que fue solo una pesadilla", contó la mujer, y agregó: "les pedí (a los agentes) que me lo devolvieran pronto para darle sepultura".

El director del hospital de Nicoya, Anner Angulo, dijo que el lunes "ordenará una investigación interna para determinar qué pasó y sentar las responsabilidades del caso", señaló el periódico.

Una mujer «resucita» cuando era embalsamada en una funeraria

Una mujer, que había «fallecido» unas horas antes e iba a ser embalsamada en una funeraria de la ciudad colombiana de Cali (suroeste), empezó a mover las manos y los brazos, relató este miércoles el tanatólogo que iniciaba el procedimiento.

«Recogí el cuerpo con el certificado (de defunción) para prepararlo. Cuando iba a iniciar, vi que la señora movió una mano, luego la otra. La miré y respiraba. La regresé a urgencias», precisó el tanatólogo Jaime Aullón a Caracol Radio.

El caso se registró este martes en una funeraria de Cali, tres horas y media después de que Aullón recibió la orden de trasladar el cuerpo de la paciente «fallecida», Noevia Serna Rivera, de 45 años.

Aullón subrayó que «el único gesto que notó fue el movimiento de brazos y el estómago» de la «difunta», quien padece esclerosis múltiple desde hace cinco años, aunque no se atrevió a asegurar si ésta había entrado en estado de catalepsia.

Según el médico Miguel Ángel Saavedra, jefe de urgencias de la clínica Rafael Uribe, de Cali, la paciente no tenía frecuencia cardíaca ni tensión arterial. «Se procede entonces a realizar un test por parte de terapia respiratoria y como resultado es declarada tristemente fallecida», precisó.

«Todo el mundo habla de un milagro, pues ella no tenía signos vitales», declaró Phanor Andrade Valencia, ex esposo de la mujer y quien fue el primero en regresar a la clínica.

El doctor Saavedra admitió que «no hay una explicación científica cierta», aunque dijo que el 'síndrome de Lázaro', como se conoce esta situación «sólo ha sido descrito en 38 casos en el mundo en algunos hospitales de Europa y Estados Unidos».

Una británica da a luz tras 18 abortos espontáneos

Una británica de 33 años, Angie Baker, ha conseguido convertirse en madre después de sufrir 18 abortos espontáneos en el plazo de 13 años.

El problema, tratado ahora con éxito, es que sufría una anomalía genética que llevaba a los glóbulos blancos a atacar el embrión al identificarlo como un elemento peligroso para su organismo.

"Emocionalmente fue como estar en una montaña rusa. Cada vez que me quedaba encinta deseaba que esa vez fuera bien y que no fuera a terminar en otro aborto. En el fondo, siempre pensé que se trataría de un pequeño problema que se podría curar", ha explicado.

Todo cambió cuando Baker fue tratada por el doctor Asan Shehata, un especialista en abortos espontáneos recurrentes del servicio médico de la Seguridad Social británica.

Shehata ha declaró que sólo había leído de otro caso como el de Baker: "18 abortos espontáneos es un número enorme. Tienes más posibilidades de que te toque la lotería que tener 18 abortos no provocados por una pura cuestión de mala suerte".

Un anciano de 80 años va a tener su trigésimo primer hijo

"Todo es regalo y deseo de Dios, que yo tenga una gran familia con cuatro mujeres y treinta hijos", explicó el orgulloso padre, Hussain Ali, sentado a las puertas de su residencia, un complejo de cabañas de adobe en el Estado indio nororiental de Assam.

El octogenario Ali, que mece en la cuna a su último retoño, un niño de dos meses nacido de la unión con su cuarta esposa, deberá añadir en los próximos meses un nuevo nombre a su larga lista de vástagos.

Y aunque presume de conservar intacta su memoria, el agricultor sólo es capaz de recordar los nombres de quince de sus hijos.

"A veces me olvido de sus nombres, pero los reconozco por sus caras", asegura Ali, para añadir que su avanzada edad no ha mermado su fortaleza: "No juzgue a alguien por su peso o su estatura. Tengo el corazón joven, aunque no me casaré más, soy feliz con mis 30 hijos y el que una de mis esposas está esperando".

El agricultor no se arrepiente de haber formado una familia más que numerosa y considera que sus cuatro esposas son "muy buenas y cariñosas".

El numeroso clan vive en cabañas separadas en un mismo recinto situado en el municipio de Mohkhuli, en el distrito de Lakhimpur, donde Ali se las ingenia para convivir por turnos con todas ellas en sus respectivas moradas.

"Mis esposas y mis niños no se quejan", alardea el agricultor, en referencia a la forma de convivencia que tiene la familia.

Las cuatro mujeres aseguran que Hussain Ali es un marido y un padre responsable, y que ofrece el mismo a trato a cada miembro de la familia.

"Es un buen hombre y muy responsable", explica Mohirun Nessa, la primera de sus esposas, con la que tiene once hijos, ocho varones y tres mujeres.

Pasados los tiempos de penurias económicas para mantener a su familia, Ali puede contar ahora con la ayuda de algunos de sus hijos que ya trabajan.

Quince de sus descendientes están casados, han formado sus propias familias y viven fuera del recinto, el mayor de ellos tiene 40 años.